Ocho años después, Angelus Apatrida volvió a romperla en The Roxy

El pasado viernes 13 de diciembre, Angelus Apatrida volvió a Buenos Aires después de ocho años, y lo hizo con todo. El lugar elegido fue The Roxy, donde la banda española desató su thrash metal ante un público que no dejó de poguear y corear cada tema.

La noche arrancó con las bandas soporte, que dejaron bien en alto el nivel nacional. Primero fue el turno de Bloodcrown, quienes presentaron temas de su disco homónimo recién salido este año, con un sonido bien clásico del género. Después llegó Frantic, destacándose con su particularidad: el baterista también es el cantante. Cerrando el bloque argentino, V.I.D.A., de Zárate, dio un show potente que repasó lo mejor de su discografía.

Cuando Angelus Apatrida salió al escenario, la energía en The Roxy cambió por completo. Desde el primer acorde de “One of Us”, quedó claro que la banda española no venía a guardarse nada. Este tema inicial, con su velocidad y fuerza característica, marcó el inicio de una descarga de thrash metal que dejó a todos electrizados. Sin dar respiro, enlazaron directamente con “Snob”, otro cañonazo que desató el pogo en toda la sala.

Uno de los momentos más memorables de la noche llegó cuando David Álvarez, guitarrista de la banda, decidió bajar del escenario para tocar “Give ‘Em War” entre la multitud. La reacción fue inmediata: un círculo de fans se formó a su alrededor mientras seguían haciendo pogo, creando una escena tan caótica como inolvidable. David, totalmente entregado, tocó como si estuviera en el centro de un campo de batalla, mientras la banda en el escenario mantenía el ritmo implacable del tema.

Otro punto alto de la noche fue cuando empezó a sonar la intro de “Sharpen the Guillotine”, un tema que se ha convertido en un himno dentro del repertorio de la banda. Apenas se reconocieron las primeras notas, el público se unió en un coro ensordecedor, cantando con toda la fuerza posible antes de que el tema arrancara por completo. El show cerró con todo: “Serpents on Parade”, “You Are Next” y “Biodrína” fueron las encargadas de ponerle el broche de oro a una noche intensa de thrash.

Es cierto que el show, con una duración de 75 minutos, estuvo dentro del promedio que venimos viendo en los últimos meses. Sin embargo, se siente la diferencia con lo que sucede en otros países, donde Angelus Apatrida suele participar en festivales compartiendo escenario con otras grandes bandas. En Latinoamérica, aunque tenemos festivales de uno o dos días en algunos países, en Argentina estas bandas suelen venir de forma separada, lo que encarece el costo para el público y dispersa la experiencia. Es una pena para los fans, tanto por el impacto en el bolsillo como por la falta de esa atmósfera especial que los festivales ofrecen, con múltiples artistas compartiendo el mismo evento.

A pesar de esto, Angelus Apatrida logró dar un espectáculo inolvidable, dejando claro que su potencia sobre el escenario es más que suficiente para justificar su regreso a estas tierras.

Agradecemos a Heresy Metal Media

PH: Leandro Barrera.